Hablemos del enfoque que subyace a una presentación verdaderamente exitosa.
No sean vendedores
¿En qué piensan la mayoría de los presentadores cuando empiezan a trabajar en un evento online? ¿Qué priorizan? ¡Por supuesto, su producto, su mercancía, su idea! El deseo de vender, informar y comunicar es el punto de partida de la mayoría de creadores de eventos online y contenidos comerciales online en general. Por eso, una parte importante de las presentaciones se centra en resaltar las ventajas y propiedades de un producto o artículo. Incluso si se trata de una presentación educativa, social o científica, sus autores enfatizan en “vender” la información o las ideas que quieren transmitir. El problema es que los espectadores lo perciben. Incluso si no tienen motivos para desconfiar de usted, el “efecto de comportamiento del vendedor” aún puede activarse.
Espera, espera: no intentamos decir nada ofensivo sobre los vendedores y especialistas en marketing. Simplemente estamos hablando del estereotipo que sugiere que debemos ser escépticos ante las palabras de un vendedor porque, actuando en su propio interés, puede, digamos, presentar información ligeramente sesgada. No estamos hablando de engaño. Es sólo que un vendedor podría optar por no mencionar ciertas cosas o embellecer otras.
La desagradable consecuencia de este estereotipo es que el "enfoque de ventas" puede provocar entre los clientes potenciales una respuesta cautelosa y el deseo de comprobar cada palabra que dice el presentador. Y dado que la mayoría de los espectadores normalmente no tienen tiempo para estas comprobaciones y verificaciones, el efecto de una presentación “de ventas” a menudo no cumple con las expectativas.
Métete en la cabeza del cliente
¿Entonces, qué puede hacer usted al respecto? Es sencillo. Pon a tus espectadores en primer lugar, no a tu oferta. Piense en la audiencia a la que va dirigida su presentación y considere sus necesidades y problemas específicos. Ponte en el lugar de las personas que verán tu presentación. Piense en cómo abordar sus desafíos. En este sentido, pensemos en cómo trabajan los buenos arquitectos. No construyen una casa abstracta y luego intentan venderla. Estudian las necesidades de las personas que vivirán en la casa y diseñan viviendas en función de sus deseos.
Un gran ejemplo del enfoque correcto para crear una presentación se puede ver en la película clásica "What Women Want", protagonizada por Mel Gibson y Helen Hunt. El personaje de Gibson logra el éxito leyendo literalmente los pensamientos de las potenciales compradoras de los productos que anuncia. Antes de trabajar en un evento online o contenido similar, el presentador debe meterse en la cabeza de los espectadores.
Por supuesto, no estamos sugiriendo que usted se apresure a ver a un telépata o a buscar formas de "expandir la conciencia". Un análisis regular servirá. Examine comentarios y discusiones en plataformas temáticas dentro del dominio de su audiencia. Mire las estadísticas relacionadas con sus empresas. Obtenga una comprensión de las tendencias y desarrollos en su campo.
Sí, es una tarea que requiere mucho tiempo. Pero hoy en día existen multitud de herramientas que pueden hacerlo más fácil y eficaz. Al igual que existen soluciones para ayudar a los presentadores. Por supuesto, lo más habitual son los asistentes inteligentes, como por ejemplo Pitch Avatar. Y fíjate, no estamos tratando de vendértelo...
¡Buena suerte a todos, presentaciones exitosas y altos ingresos!
